[E3 2013] The Division, Impresiones

Ubisoft parece haberse especializado en los últimos años en ser la compañía que mejor juega el rol de ilusionista durante los E3. Había que ir unos años atrás para recordar cómo la compañía anunció casi de tapadillo un juego que terminaría convirtiéndose en una saga multimillonaria (Asassin's Creed), pero sobre todo en 2012 fueron capaces de hacer temblar los cimientos del evento con la presentación por sorpresa de Watch Dogs, un juego de mundo abierto y ambientación tecnológica que apareció de la nada en su conferencia de prensa. La jugada les funcionó muy bien y la han vuelto a repetir este año con The Division, un RPG de mundo abierto que si bien no ha causado tanto impacto como aquel otro título si que ha despertado el interés de propios y extraños por su ambicioso planteamiento y, sobre todo, por su excepcional apartado técnico. Sobra decir, claro, que saldrá en PlayStation 4 y Xbox One, por lo que no lo veremos al menos hasta 2014.

Si en Assassin's Creed se nos propuso un mundo abierto ambientado en periodos históricos, y con Watch Dogs el enfoque va directo hacia la tecnología, en The Division se plantea un futuro post-apocalíptico alternativo en el que un virus causó el caos absoluto en la ciudad de Nueva York, llevando a la sociedad a niveles muy preocupantes. Esto derivó en la creación de un grupo de personas entrenadas denominado "La División" (The Division en inglés), cuyo objetivo es intentar mantener el orden y devolver la ciudad a su esplendor. Las cosas son complicadas porque los supervivientes se han vuelto ariscos, casi salvajes, y los contagiados se marginan. Todo esto absorberá la fuerza de la ficción de Tom Clancy para presentar una trama que se desarrollará tanto en la campaña para un jugador como en el modo online, donde hará que hacer frente a jugadores de todo el mundo.

 

Abriendo el mundo
La demo que pudo verse en la conferencia de Ubisoft servía de perfecto punto de partida para explicar cómo funciona The Division. En síntesis, estamos ante un juego cuyas mecánicas se heredan de los juegos de acción en tercera persona, es decir, podemos utilizar armamento con un sistema de apuntado muy similar a los títulos del género, cubrirnos tras distintas zonas o incluso formar estrategias tácticas para rodear a nuestros objetivos. Todo esto no inventa nada nuevo en un sentido estricto, se limita a ordenar las ideas para presentarlas de forma sólida. En este aspecto, ningún cambio. Nuestro personaje sin embargo irá desarrollándose a medida que juguemos y no sólo desde un punto de vista narrativo, sino que podremos modificarlo a antojo mediante un sistema de juego de rol ligero consistente en aprender habilidades, mejorar sus atributos, interactuar y explorar, etcétera.

Donde verdaderamente rompe moldes The Division es en su integración de todas estas mecánicas en un entorno de mundo abierto con su generosa ración de componentes online. En la misión que pudo verse en la demo, cuatro personajes (cada uno controlado por una persona, se entiende) debían avanzar hasta una zona y acabar con un grupo de enemigos, dándose órdenes entre sí, pasándose objetos y cooperando para salir vivos de la batalla. Además de un chat por voz (al menos eso podía intuirse en el vídeo) contaremos con una novedad añadida como es la inclusión de una persona extra que controlará a un personaje directamente desde una tablet o smartphone compatible. Esto no es nuevo en Ubisoft, pues ya probaron algo similar con el Gamepad de Wii U en Rayman, y lo harán también con Watch Dogs. Lo que cambia aquí es el nivel de interacción.



La persona que controle a ese cuarto personaje mediante tablet/smartphone se unirá al juego de forma absoluta mediante una aplicación especialmente diseñada para tal fin, lo que significa que verá cómo se mueven los demás jugadores, las acciones realizadas, etcétera. No sólo eso: también tendrá un papel relevante, pues será él el encargado de -por ejemplo- salvar a sus amigos de un ataque de rivales. Para ello, el jugador de la tablet actuará como una especie de drone de combate, pudiendo lanzar misiles sobre un objetivo (algo útil cuando el grupo de a pie esté rodeado) o gestionar otros elementos tácticos. Lo único que será diferente usando este terminal es que el apartado técnico no se respetará tal cual, sino que la vista será isométrica (como consecuencia de estar en el aire) y no en tercera persona.

No se han dado muchos detalles de la campaña para un jugador, habiéndose centrado de momento los esfuerzos en mostrar esa funcionalidad de juego multijugador masivo que explotará con la inclusión de los grupos de usuarios (¿quizá clanes?) que tendrán total libertad para caminar por esta Nueva York (se ha visto una Manhattan totalmente destrozada) y sacar adelante sus objetivos. Así, imaginad que entráis a jugar y que formáis un grupo de ataque con un par de amigos para ir a conquistar un territorio. Probablemente allí encontraréis a otro grupo de personas intentando hacer lo mismo, lo que llevará a un combate por dominar la zona. En un single player esto se haría introduciendo bots o, directamente, un script de enemigos controlados por la IA. Ahora serán personas reales, lo que abre innumerables posibilidades y lo hará todo más orgánico.



Para hacer la experiencia más completa, se ha podido saber que el juego arrancará obligando al jugador a gestionar recursos y sobrevivir en una situación límite. Pensad en State of Decay, Day Z o The Last of Us, porque aquí el inicio de la aventura mostrará al agente controlable despertándose de su letargo y sólo comida, agua y munición para tres días. Lo que pase después dependerá del usuario, por lo que si se necesita munición habrá que buscarla en las localizaciones del escenario, y lo mismo ocurrirá con otros elementos necesarios para la supervivencia. Decíamos que viviremos en un futuro hipotético, casi distópico, y eso dará de sí la inclusión de varios elementos tecnológicos como un mapa que se representa como una holografía a lo largo del escenario, o un reloj de pulsera con numerosas opciones que funciona como menú con todas las opciones disponibles.

La siguiente generación de MMO
Massive Entertainment es la compañía responsable de The Division, estudio que se apoyará en el motor Snowdrop para crear un apartado técnico puntero con nada que envidiar (más bien lo contrario) a otros juegos de mundo abierto y online masivo. El director del estudio, David Polfeldt, explicaba a IGN en el E3 cómo "queríamos un juego más ligero que World of Warcraft (...) [aunque] no estoy llamando a The Division un MMO." Esto no significará no obstante que vaya a haber clases, si bien se ha especificado que podremos progresar en el árbol de habilidades como prefiramos, pudiendo replantear todo lo aprendido con un solo botón, lo que hará de nuestro personaje algo sumamente versátil. A nivel técnico luce espectacular, con numerosos efectos de luz y un trabajo de físicas muy notable, incluso en pequeños detalles. En la demo, el personaje usaba como cobertura un coche de policía que tenía una puerta medio abierta, y al pasar sobre ella ponía su mano para cerrarla de forma lenta y suave, de forma tremendamente natural. The Division llegará en algún momento del próximo año para replantear las posibilidades del multijugador masivo asociadas a unas mecánicas deudoras de los juegos de acción en tercera persona. De momento apunta muy alto, así que veremos cómo funciona el producto final cuando llegue a las tiendas en 2014 para PlayStation 4 y Xbox One. Un último detalle: si los usuarios hacen fuerza y lo reclaman, habrá también una versión para PC.