Magia en piezas

Item: LEGO Harry Potter: Años 1-4
Rating: 7.5

Las piezas de Lego vuelven a la carga con una nueva parodia de una exitosa franquicia. La magia de Harry Potter se adapta a un título que no innova demasiado pero que es alegre, divertido y desenfadado, con muchas horas de diversión por delante.

Ramón Méndez

Actualizado a 24 de septiembre de 2014 11:50 CEST

Traveller's Tales lleva ya casi dos décadas ofreciéndonos títulos de calidad para todas las plataformas. Resulta curioso que uno de sus primeros lanzamientos fuese la adaptación de la película Drácula, ya que desde entonces se han ido especializando en obras más amenas para toda la familia: desde Mickey Mania hasta Sonic, desde Toy Story hasta Crash y Spyro, pasando por adaptaciones de películas como Las crónicas de Narnia o Buscando a Nemo. Pero desde hace unos años parece que han encontrado su filón con la franquicia Lego, la cual prácticamente se ha convertido en su trabajo fundamental. Todo empezó en 2005, con el lanzamiento de Lego Star Wars.

El original título bebía de dos elementos fundamentales que permitieron el gran éxito que supuso: por un lado, la explotación y parodia de una franquicia cinematográfica reconocida a nivel internacional; por otro, una gran capacidad de diversión para toda la familia. Una fórmula que se repetiría en los títulos posteriores: Lego Star Wars II, Lego Indiana Jones, Lego Batman, Lego Rock Band, Lego Indiana Jones 2 y el que nos ocupa, Lego Harry Potter. Desde luego, no se puede negar el encanto que tiene el ver a los personajes bien conocidos parodiados con ese humor tan particular de Lego, y posiblemente en ese aspecto la versión de Harry Potter se convierte en una de las más adecuadas para explotar el potencial de la franquicia.

Media historia
Como el propio título del juego indica, se trata solo de la primera mitad de las aventuras de Harry Potter, los cuatro primeros años; es decir, recorreremos los sucesos y entornos correspondientes a La piedra filosofal, La cámara de los secretos, El prisionero de Azkaban y El cáliz de fuego. Es importante destacar, en este aspecto, que se usa como base las adaptaciones cinematográficas, no las novelas originales de J.K. Rowling, por lo que es de esperar que la siguiente entrega de Lego Harry Potter abarque otras cuatro películas (La orden del fénix, El misterio del príncipe y las dos películas de Las reliquias de le muerte). Pero no adelantemos acontecimientos y centrémonos en el título que nos ocupa, el recorrido por las primeras aventuras del niño mago.

No se puede negar (e intentar decir lo contrario sería absurdo) que todo aquel que haya disfrutado de cualquier entrega anterior de Lego ya sabrá qué esperarse de Lego Harry Potter. Y en ese aspecto, el juego no engaña ni se oculta en ningún momento: repite fórmulas, ideas, conceptos e incluso, en gran medida, presentación. Pero lejos de intentar disimularlo, conocedor de cuáles son sus virtudes, se esfuerza por explotarlas y potenciarlas, plasmar la evolución seguida durante todos estos años y redondear una experiencia que, si bien no es original, sigue siendo tan divertida como el primer día. Eso sí, siempre y cuando se conozcan las franquicias originales en las que se basa la experiencia, para poder disfrutar de sus personajes y parajes, así como de la infinidad de guiños introducidos.

Así pues, a nivel argumental Lego Harry Potter nos narra la historia seguida, desde el inicio de la primera película hasta el final de la cuarta, haciendo uso de las carismáticas piezas de Lego en abundantes secuencias de vídeo cargadas de humor. Y aunque podría parecer por momentos que las secuencias se llevan gran parte del argumento de las películas, lo cierto es que los momentos en los que podremos controlar a los personajes están bien estudiados y se adaptan perfectamente a los originales. Sin duda, un excelente trabajo artístico y de diseño por parte de Traveller's Tales, que consiguen ofrecer, tanto jugable como argumentalmente, el que posiblemente sea uno de los mejores juegos de Harry Potter hasta la fecha.

Sistema de juego
Si la presentación argumental, o mejor dicho, paródica de la historia no sorprende a nadie a estas alturas, tampoco lo hace en exceso un sistema de juego que repite prácticamente todas las ideas ya establecidas como señas de identidad de la franquicia. Los escenarios que recorreremos estarán cargados de elementos para romper, pequeños puzles por resolver, zonas secretas por explorar Pero lo más importante, sin duda, son la ingente cantidad de monedas Lego que podremos recoger para, posteriormente, invertirlas en la compra de más personajes, extras secretos, etcétera. Una mecánica sencilla que llega a ese coleccionista compulsivo que llevamos todos dentro, muy estudiada para que con su sonido y los escenarios cargados de ellos tengamos ganas de conseguir tantas como sea posible.

Los escenarios están hechos para jugar con ellos, para montar las piezas de Lego y experimentar con el entorno. Además de las monedas, tendremos varios extras ocultos más, como pueden ser los ladrillos o los fragmentos del escudo de las casas de Hogwarts. Y no son precisamente pocos los escenarios, ya que a lo largo de la aventura recorreremos todos los emplazamientos que se han podido ver en las películas, desde los recovecos de Hogwarts hasta Hogsmeade o el callejón Diagón, entre muchos otros. Los puzles, cargados de humor, no son muy complejos y se repiten de forma habitual a lo largo de la aventura, pero son tan satisfactorios todos ellos que no se hacen especialmente repetitivos (al menos, no más de lo que la propia mecánica pueda llegar a cansar al usuario en cuestión).

Pese a que en gran medida todos los elementos se mantienen inalterados, sí que hay un cambio fundamental en la dinámica, al igual que ocurre en las entregas anteriores: donde Luke tenía un sable láser, Indy un látigo, o Batman sus artefactos, Harry tiene la magia. Serán varios los conjuros que se podrán utilizar durante el juego, siendo posiblemente el más recurrido el tradicional Wingardium Leviosa, y como es lógico los puzles estarán adaptados a esta particularidad mágica. Aunque la idea es buena, el sistema de apuntado con la varita es poco preciso y en ocasiones se hace algo molesto, siendo menos cómodo de utilizar que otras versiones en entregas anteriores: debemos dejar el botón pulsado y enfocar la mirilla hacia el objeto a manipular. Con práctica se consigue dominar, pero no es tan intuitivo como podría haber sido.

Apartado técnico
Siguiendo nuevamente las directrices marcadas por sus predecesores, lo cierto es que Lego Harry Potter no tiene ningún elemento visual que destaque especialmente dentro del catálogo de ninguna de las plataformas en las que se lanza. No obstante, no se puede negar que está muy cuidado y detallado, con abundantes elementos en pantalla, una buena definición de personajes y objetos, y unas animaciones satisfactorias (pese a la poca movilidad que de por sí ofrecen los muñecos de Lego). El apartado sonoro, por su parte, está mucho mejor llevado, jugando con el sonido de forma excelente, tanto melodías como efectos, logrando una ambientación excelente que bebe de las películas y recrea con acierto todas las situaciones de los originales.

Pero la franquicia Lego no destaca por su espectacularidad visual, si no por su excelente jugaiblidad, y en este aspecto Lego Harry Potter vuelve a salir triunfante de la prueba: es un título altamente divertido, con una excelente respuesta del mando e infinidad de opciones de juego. La exploración a disposición del usuario es muy amplia, hay muchísimo por hacer y desbloquear todos los secretos del juego requiere muchas horas (destacar en este aspecto que se han mitigado los problemas de desorientación en los entornos). Además, al igual que las anteriores entregas, es posible jugar con un amigo y disfrutar de la aventura en compañía. Un título sencillo, directo, cargado de opciones de juego y que hará las delicias de usuarios de todas las edades que sean amantes de la obra de J.K. Rowling.

7.5

Bueno

Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.