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Stacking

Stacking

Originalidad, puzles y humor

Double Fine nos presenta su nuevo título descargable tras su primera experiencia con Costume Quest. Stacking es una original apuesta, dónde los protagonistas serán las matrioskas, las tradicionales muñecas rusas, que se combinarán para resolver una variedad de disparatados puzles. El equipo de Tim Schafer no defrauda en absoluto.

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Con 10 años a sus espaldas, Double Fine Productions puede alardear fácilmente de la originalidad de sus títulos. Psychonauts, Brütal Legend, Costume Quest y ahora Stacking son títulos diametralmente opuestos en mecánica, ambientación y estilo; aunque con el común de una dosis constante de humor. Tim Schafer, quien en su día trajo a la vida aventuras tan destacadas como Grim Fandango, Full Throttle, los dos primeros Monkey Island y el magnífico Day of the Tentacle, delega en Lee Petty (director de Arte de Double Fine) la dirección en el desarrollo de Stacking.

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La aventura se desarrolla en un mundo ambientado en la década de los 30 del pasado siglo, con las muñecas rusas como habitantes del mismo. Un malvado Barón ha esclavizado a los jóvenes de este mundo y los ha forzado a trabajar para él. Todos los descendientes de la humilde y trabajadora familia Blackmore han sido secuestrados, salvo Charlie, el miembro más pequeño de la familia y protagonista de Stacking. Ante estas circunstancias, el joven muñeco es enviado tras la pista del paradero de sus hermanos, que han sido enviados a variadas dependencias del Barón para ser explotados con trabajos severos. La estación de trenes, un ferry, un zepelín y un gigantesco tren serán los cuatro grandes escenarios de la aventura.

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La mecánica básica del juego es tan simple como el concepto tras las muñecas matrioskas de albergar una muñeca dentro de otra iterativamente. Charlie Blackmore será siempre el origen de los anidamientos y podremos crecer siempre y cuando nos encontremos una muñeca de un tamaño inmediatamente superior, es decir, hay un orden tanto de crecimiento y decrecimiento estricto en función del tamaño de las muñecas. La originalidad de Stacking no viene sólo en parte de este concepto que en cierta manera ya es suficiente, también en la personalidad que les han imbuido a la gran variedad de personajes diferentes. Cada vez que nos acoplemos a una figura, tendremos a nuestra disposición una nueva habilidad, pero sólo aquella perteneciente a la muñeca visible.

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Estas habilidades son tan dispares como mover sensualmente las caderas para encandilar a los muñecos varones, eructar, lanzar ventosidades (reíd, pero es una de las habilidades que más usaremos), pintar, volar... y hasta una larga e innumerable variedad de ellas. Algunas de ellas son puramente de adorno y no tendrán utilidad alguna dentro de los puzles, otras en cambio serán esenciales. Ante una mecánica simple como es la de Stacking, se ha puesto mucho mimo en cómo las habilidades nos permiten interactuar con el escenario y otros personajes, hasta tal punto que en ocasiones levantarán en nosotros una gran sonrisa ante las posibilidades que ofrece. Desafortunadamente, no es hasta los momentos finales de la aventura en la que se nos permita combinar habilidades para resolver puzles ligeramente más complejos, de haber sido así desde un primer momento, el juego hubiera sido mucho más rico en puzles y situaciones.

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En cada uno de los cuatro grandes escenarios que componen Stacking hay un objetivo principal que permitirá liberar a un miembro de la familia Blackmore. Para resolverlo tendremos que combinarnos como describimos en el anterior párrafo con los personajes para resolver los puzles que se nos presenten. El principal problema es que la dificultad de estos puzles principales es muy reducida y prácticamente será un paseo llegar al final de Stacking si no nos paramos a disfrutar de los retos adicionales. Son sin duda estas misiones secundarias las que amplían y mucho la experiencia jugable  del título.

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Hay tres formas de expandir significativamente la vida útil de la aventura, que además dan lugar al desbloqueo de sus respectivos logros y trofeos. La primera consiste en completar la colección de muñecas especiales que pululan por cada escenario, algunas más difíciles de conseguir que otras. La segunda consiste en intentar repetir los puzles principales pero variando la forma de solucionarlo, aquí el sentido del humor prevalecerá a la hora de encontrar las alternativas y no os podéis imaginar el grado de 'bizarrismo' al que pueden llegar algunas de ellas. Por último, las travesuras son pequeños retos ocultos que tendremos que descubrir interactuando en determinadas situaciones con las habilidades. Todos los retos y personajes desbloqueados se almacenarán en el menú principal para poder revisarlas con calma a posteriori y tener constancia de lo que aun no hemos descubierto para llegar al 100% de completitud.

El control del personaje resulta bastante intuitivo, así como el propio para la cámara. Aunque ésta, a pesar de ser manual, por momentos nos dejará en una mala situación visual que nos impedirá ver incluso al propio jugador. Stacking está por completo traducido al castellano, aunque las voces serán sonidos guturales de los propios muñecos. De hecho, el mutismo de los personajes es la base de las secuencias cinematográficas basadas en el cine mudo de principios del siglo pasado.

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El hecho de que  Lee Petty, director de arte de Double Fine y quién ya trabajó en Brütal Legend, sea el principal responsable de Stacking se hace notar a la hora de ver que tanto jugabilidad como aspecto gráfico casan en una notable armonía. Desde luego no es un título puntero si hablamos desde el punto de vista gráfico, de hecho en ocasiones puede parecer hasta limitado, pero tiene una completa personalidad que se desprende del diseño de escenarios y personajes con hasta el más mínimo detalle.

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8.5

Muy Bueno

Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.