Peleas de patio de colegio en la china medieval...

Mystic Heroes es el nuevo juego de Koei (Dynasty Warriors o Kessen) para PS2, port directo de la versión GC, y aunque su puesta en escena recuerda a una versión de Dinasty Warriors para niños, detrás de la apariencias se encuentra un título interesante y adictivo que merece tenerse en cuenta.

Mystic Heroes es conocido por muchos como la versión "para niños" de Dynasty Warriors, pero la verdad es que eso es totalmente injusto ya que solo se basa en el aspecto de los personajes, un tanto SD, pero no en la propia mecánica del juego, que no tiene porque ser incompatible a la del propio Dynasty Warriors, aunque sin duda son dos juegos que guardan tanto cosas en común como cosas radicalmente distintas.

Para hablar claro, Mystic Heroes es un Beat'em Up con todas las de la ley, un machaca botones compulsivo ideal para descargar la adrenalina. La premisa general es coger a uno de los 4 héroes (cada uno con sus propios atributos en fuerza, velocidad y magia) y abrirse camino entre hordas de enemigos a base de espadazos y magias varias, todo a la vez que se van aumentando las características del personaje conforme adquiere más experiencia de combate.

A la historia no hay que pedirle proezas, ya que es poco menos que inexistente (y un poco chorra), aunque está basada en una novela china llamada Houshin Engi, que en teoría da para mucho más que lo que aquí se demuestra, pero que al ser un juego puramente de acción, no debería ser necesaria o echada en falta por parte de jugador,

Para rematar, hay una niebla más que evidente que limita un buen tanto la capacidad de visión. Dicho esto, podría aparecer que los gráficos de este juego son desastrosos, pero la realidad es que son mucho mejores de lo que esto podría dar a parecer.

Aunque los modelos no sean muy detallados, si son convincentemente sólidos y agradables a la vista, pero lo que más destacan de ellos es la fluida animación, que hace de los movimientos cobren vistosidad. Pero lo más impresionante es el increíble numero de enemigos que aparecen simultáneamente en pantalla, tal que será imposible dejar de aporrear botones para intentar salir de los caos que se forman. Realmente es uno de los puntos fuertes del juego, que mueve más personajes en pantalla que el propio Dinasty Warriors y por lo tanto lo hace un juego menos estratégico y más arcade.

Pero nada de esto serviría de nada si hubiera relentizaciones de pantalla como se podría esperar, pero no es así, y ahí reside el mérito del motor gráfico de Koei. A pesar de estar rodeado de decenas de enemigos y lanzar una magia (con un convincente efecto de partículas que abarca casi toda la pantalla), todo se mantiene en unos inamovibles 60 FPS, dándole una gran suavidad al caos reinante. Todo esto hace pensar que  los sacrificios adoptados, como la niebla, son una sabia elección viendo el buen resultado general.

Las magias son varias y dependen de la posición en las que sean usadas, unas hacen que el personaje empiece a combinar golpes de forma casi imparable, otros lanzan rayos de energía, remolinos de magia verde, o rayos que caen del cielo. El buen uso de las magias es fundamental, ya que permiten escapar de más de un apuro (especialmente la que combina salto más magia, normalmente bastante poderosa y tremendamente efectiva para escapar de una horda enemiga a la vez que librarse de unos cuantos de ellos al mismo tiempo).

A medida que se va avanzando, se van obteniendo conjuros más poderosos, a la misma vez que los enemigos también empiezan a ser más duros. Nunca se llega a un punto en el que sea demasiado poderoso o demasiado débil, en ese sentido, el juego está muy equilibrado.

Los enemigos finales añaden una interesante nota de color, ya que no solo son grandes, fuertes y poderosos, sino que suelen dar combates muy interesantes, en los que ya no influye para nada el "machacar" botnes, sino en la estrategia y habilidad del jugador. Algunos de estos proporcionan combates muy emocionantes que merece la pena vivir. Además, en los combates "ordinarios" hay el suficiente equilibrio como para que no se convierta en un paseo, hay que tener cuidado, controlar bien los golpes realizados y vigilar la barra de salud. Además, habrá que estar muy atento a los diferentes tipos de sorpresas que se pueden encontrar, como explosivos, rocas que caen...

Por si los 8 escenarios divididos en varias subfases fueran insuficientes, hasta 4 jugadores pueden participar en un divertido modo multiplayer, al que se le suman un más que interesante modo Survivor, aumentando todavía más las posibilidades lúdicas de este título. La principal pega a la jugabilidad es que a veces resuta excesivamente caótico, lo que dará como resultado algunos momentos de recibir golpes a diestro y siniestro con poca capacidad de reacción, pero son momentos puntuales, y casi vienen bien para añadir un poco de tensión.

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