La guerra de los mundos

Sin lugar a dudas existe una única razón para que toda la humanidad se ponga de acuerdo y aúne fuerzas con un mismo objetivo. Lamentablemente, no me refiero a la pobreza ni la enfermedad, no... ni tan siquiera al cambio climático le corresponde este honor. Las víctimas de semejante ira no podrían ser otros que los invasores extraterrestres. Y este planeta no es lo suficientemente grande para los dos.

UFO, que viene del término anglosajón para OVNI, es ya un clásico del entretenimiento electrónico. Años lejanos aquellos en los que el primero, Enemy Unknown o XCom: UFO Defense se diera a conocer. Y, a día de hoy, son varios los títulos que se han aprovechado del glorioso éxito que tuviera el original en su día.

Por desgracia, la aceptación del público ha sido compartida sólo por algunos de los sucesores, y parece que el modo de desarrollar un título que reviva la jugabilidad del ancestro del clan pero haciendo gala de los avances técnicos de nuestros días, es una incógnita casi aún sin resolver. Una licencia conflictiva y polifacética la que ahora, de manos de Paradox Interactive, y por la gracia de Friendware, llega a España.

Imaginemos, por un instante, que una extraña raza del espacio exterior decidiera convertir la Tierra en su próximo destino de vacaciones. Dado que los nativos del planeta, es decir, nosotros mismos, no colaboramos con su proyecto hotelero, deciden abducirnos, desmoralizarnos y diezmarnos... aunque no necesariamente en este orden.

La guerra no tendrá un frente de batalla, sino cientos de escaramuzas, ya que no se trata de una invasión a gran escala, más bien, la táctica alienígena es la del desgaste físico y moral... ¡pero qué astutos!. Pues así, sin más contemplaciones, hemos resumido el argumento de la saga en un párrafo. Sabemos que suena a guión de película y huele a proyecto de superproducción, pero sabe a juego de estrategia táctica y rezuma adicción por los cuatro costados, garantizado.

Con mayores o menores modificaciones en el argumento o en el sistema de juego, todos los títulos de la colección comparten esta ambientación. ¿Cambios posibles?, pues, por ejemplo, el juego que hoy analizamos tiene lugar en el lejano planeta colonial de Esperanza, y no en la Tierra. Pero si creéis que ésta ha sido la única alteración, os recomiendo seguir leyendo atentamente este artículo, aunque casi estáis en lo cierto.

Nuestra tarea es clara, derrotar la amenaza exterior. La razón, cristalina, dado que Esperanza es un punto importantísimo en la defensa del planeta Tierra... Pero lo que no está tan claro aún, para aquellos que jamás hayan probado un UFO, es cómo se supone que vamos a hacerlo. Será una organización, formada por los hombres más valerosos y capaces de todo el planeta, la que cargue a sus hombros la responsabilidad de frustrar los planes del extraterrestre invasor.

Ellos son... los XCom. Feroces combatientes, habilidosos técnicos y experimentados científicos formarán nuestro grupo de resistencia. Y a nuestra disposición, el más completo arsenal de armas y conocimientos jamás recopilados por el hombre. El juego da comienzo en la colonia de Esperanza. Allí, la humanidad ha establecido una serie de avanzadas con el fin de expandirse por todo el Universo.

Como no podría ser de otra manera, debido a nuestra naturaleza humana, hemos conseguido repartir este paraíso espacial en varias potencias o continentes, cada uno con su propio estado gubernamental. Cada uno de ellos colaborará con la causa mediante el pago de diferentes subvenciones a los XCom, siempre y cuando nuestras hazañas hablen por nosotros, y sepamos mantener a los jefes de estado contentos, además de asegurar que sus habitantes se encuentren a salvo.

La base se ubicará en uno de estos continentes, y podremos construir más bases en un futuro, siempre y cuando el tiempo y nuestros balances lo permitan. Más bases implican un menor tiempo de respuesta ante las amenazas, y un mayor número de facilidades para investigar o construir material para nuestra organización. En otros títulos de la saga se nos permitía elegir la ubicación inicial de la primera base, pero en UFO: Extraterrials no se da el caso, y nuestra localización original se dará establecida de antemano. Con el centro operacional en funcionamiento, lo siguiente es disponer de las diferentes habitaciones o zonas dentro de la misma.

Necesitaremos barracones para alojar a nuestros escuadrones, hangares para nuestros cazas y transportes, laboratorios, talleres e incluso hospitales. No olvidemos los sistemas de detección de ovnis, o las salas de interrogación. Estás y algunas más serán las posibilidades. Para edificar, nada tan sencillo como elegir el tipo de facilidad y su ubicación dentro de la base, mientras poseamos los créditos suficientes como para construirla. La parte estratégica comienza aquí, eligiendo que consideramos más importante y como administramos nuestros recursos monetarios.

Si la base funciona correctamente, deberíamos ser capaces de rastrear las señales que emiten las aeronaves alienígenas. Al localizar una, nuestra misión como defensores de la humanidad es interceptarla. Los cazas son la mejor opción para tal empresa, ya que los transportes carecen de armas poderosas y son fácilmente abatibles por los cazas enemigos.

Podemos enfrentarnos al enemigo de tres formas, según la intensidad que queramos dar al combate. Si derribamos una de sus naves, y los restos no quedan totalmente calcinados como resultado de nuestra ofensiva, o si no caen al fondo del mar, podremos proseguir con la siguiente fase de nuestro plan de defensa. Los equipos de combate a pie pueden ser dirigidos hacia restos de naves, bases enemigas o incluso naves que hayan tomado tierra, incautas y desconocedoras de nuestra presencia. Aquí es donde realmente comienza el aspecto táctico del juego.

Una vez seleccionemos a los hombres y mujeres que acudirán a la misión, los equipemos correctamente, o, en su defecto, lo mejor que podamos, estaremos preparados para hacer frente a los alienígenas cara a cara. Son bastante feos, así que en eso, nos llevan ventaja a la mayoría de los humanos. Si todo va bien, nuestro transporte debería aterrizar donde queríamos sin incidentes... si todo va bien.

Sólo nos resta hacer uso de nuestras habilidades tácticas para salir airosos. La misión se completará cuando todos los alienígenas estén muertos o incapacitados, o, en su defecto, ellos hagan lo propio con nuestros subordinados. Por supuesto, si las cosas se ponen feas, siempre podemos poner pies en polvorosa, pero sólo aquellos miembros del escuadrón que se hallen en el interior del transporte se salvarán, dejando al resto a su suerte... y estos seres no parecen destacar por su exceso de piedad ante el enemigo. Las acciones en una misión son básicamente dos: moverse y disparar.

Será mejor moverse a cubierto y mucho mejor si se acierta al disparar, pero la maestría en este grado requiere un poco de experiencia y paciencia. Muchos deberán caer antes de que decidamos usar el sentido común en el campo de batalla, pero así es la curva de aprendizaje... lenta y dolorosa.

Las tropas pueden agacharse, con el fin de no ser un blanco tan fácil y disparar responder mejor al enemigo. Las armas tiene diferentes modos, desde un disparo apuntado hasta ráfagas de tres proyectiles. Pero no todo serán armas de fuego o explosivos, ya que tendremos a nuestra disposición botiquines y toda clase de utensilios para ayudarnos. Aún así, la clave del juego radica en esos dos aspectos, y una vez dominados, nuestro equipo puede convertirse en una máquina exterminadora de amenazas alienígenas.

El objetivo de estas misiones, además del obvio, también es el de recoger información sobre los extraterrestres. Con los diferentes objetos que consigamos en la misión, e incluso con los cuerpos de los enemigos caídos o los interrogatorios a los alienígenas capturados, nuestro conocimiento de los mismos aumentará considerablemente. Podremos hacer uso de su tecnología y mejorar la nuestra propia, copiar su armamento y darles un poco de su propia medicina.

Este es otro punto clave para la victoria, y no desperdiciéis la oportunidad de una misión para recopilar la sabiduría de estos seres del espacio, ya sabéis que el primer paso es conocer al enemigo, aunque si no se deja, antes hay que dispararlo. La otra ventaja de las misiones es la experiencia, pero no la nuestra propia, que aunque no sea mala, no supone una mejora clara de nuestro escuadrón.

Tras una empresa exitosa, algunos de nuestros soldados subirán de rango militar, y con serán capaces de mejorar sus atributos. Esto nos permitirá tener mayor número de punto de acción en un turno, una puntería fiable, una salud de hierro o la valentía necesaria para comandar al grupo. Crear un comando a medida es otro aspecto recomendable para conseguir que los XCom frenen el avance de la amenaza que se cierne sobre Esperanza.

Las pantallas de Extraterrials son casi calcadas de las del resto de la saga. Nos encontraremos con la típica fase principal, un mapa del mundo, ya sea la Tierra en otros o Esperanza en este caso, donde se nos concederá libertad de movimiento, zoom, giros y volteos. Sobre el mismo, las ubicaciones de continentes y bases, además de unas representaciones muy bonitas de las naves y cazas, y hasta de los combates que tengan allí lugar, pero a una escala muy pequeña. El interfaz sufre pocos cambios, o más bien casi ninguno.

Las pantallas de la base son tan parecidas, e innovan tan poco en originalidad, que casi parece estar jugando al primero de los UFO, y, más que una ventaja, puede ser un lastre a la hora de tener en cuenta el trabajo de los desarrolladores. Aprovechando el impulso, se podría haber mejorado la presentación de las opciones en pantalla. Excepto ese mapa inicial tridimensional, no volveremos a encontrarnos con nada parecido hasta que haga su aparición la representación de las zonas de misiones.

En este caso, un entorno isométrico describirá los elementos del paisaje y a nuestras tropas o enemigos. Ninguna mejora realmente sugerente respecto a los predecesores se hace notar, e incluso es posible que UFO: Extraterrials haya perdido capacidad de personalización en las tropas, teniendo en cuenta lo visto en algunos otros juegos de la saga. Ciertamente los gráficos son mucho más dignos de los tiempos que corren, pero tampoco destacan por encontrarse entre lo mejorcito del gremio. Se puede decir, a ciencia cierta, que cumplen a la perfección con su encargo, sin encontrar verdaderos problemas a la hora de identificar formas y colores en el campo de batalla. Aún así, quizás se debería haber aspirado a conseguir un entorno visual mucho más trabajado, al gusto de los seguidores de los XCom.

Melodías con gusto a ciencia ficción, desbordadas por retoques electrónicos y extraños sonidos que parecen sacados del espacio exterior. Esta es la manera con la que UFO: Extraterrials tiene  pensado entretener vuestros oídos durante en transcurso de la partida. Sobre la música, ¿qué decir?, pues, como ya es costumbre, repetitiva. Pocas variaciones en los acordes, pero, a favor, muy bien integrada en el aspecto general del juego. Las melodías no harán la función de banda sonora, como es en el caso de algunos títulos, pero harán la función de hilo musical y mantendrán el sentido auditivo atento durante toda la partida.

El problema es cuando te pasas un buen rato frente al monitor y comienzas a tararear los tonos, entonces ya puedes dejar la partida, porque has sido completamente abducido por los alienígenas. Mala suerte. Aunque por otro lado, los efectos de sonido se complementan perfectamente en la partida. Disparos de láser o plasma, el caminar de nuestros hombres o el gruñido de lamento del enemigo que cae. Todo está dispuesto de buena manera, y, aunque no se sale de la normalidad, también hay que felicitar de vez en cuando por los trabajos bien hechos, aunque se supongan bien hechos de antemano.

En vista al aspecto jugable, UFO, en cualquiera de sus versiones, tiene la gran ventaja de ser tremendamente adictivo. El sistema de juego es tan parecido entre todos los títulos de la saga, que lo que hemos contado hasta ahora se puede interpretar casi para todos y cada uno de los juegos que componen esta colección. Navegar por el mundo de juego es sencillo e intuitivo, y hacerse con el control de las bases y naves sólo lleva un corto intervalo de tiempo.

Equipar las tropas termina siendo una tarea ardua y repetitiva, sobre todo si los cambios son masivos, pero casi todas las opciones posibles se pueden realizar con un arrastrar del ratón y dos clics. Como en títulos anteriores, el punto de referencia para la investigación y el conocimiento seguirá siendo la UFOpedia, pero ésta tampoco ha sufrido cambios significativos desde las versiones anteriores. Hay algunos aspectos que hacen perder puntos al juego.

Se ha optado por simplificar el reclutamiento de recursos humanos, de manera que es imposible contratar nuevas tropas o trabajadores, y quedaremos a merced de los nuevos voluntarios que periódicamente llamen a la puerta de nuestra base en busca de un trabajo peligroso y mal pagado. A esto es debido que la dificultad del juego haya aumentado considerablemente respecto a su antecesores, ya que es ridículamente sencillo quedarnos sin soldados para la siguiente misión.

Recordemos que UFO sigue un círculo vicioso, si no hacemos misiones, no recibimos subvenciones. Si no hay subvenciones, no hay dinero para mejorar las tropas. Si las tropas no van equipadas competentemente, son heridas con facilidad. Si las tropas quedan malheridas o muertas, no podemos hacer misiones... y vuelta a empezar. Para subsanar este catastrófico error, los desarrolladores han optado por disminuir la cantidad de bajas permanentes, de manera que la mayoría de los altercados violentos contra los seres del espacio exterior se resolverán con una secuencia de graves hematomas y heridas, por las cuales nuestro soldado tendrá que permanecer un tiempo internado en el ambulatorio de la base.

Investigar o producir material logístico y ofensivo no es tampoco una simpleza. La falta de recursos nos impide conseguir el nivel de desarrollo deseado, y, casi sin quererlo, volveremos a entrar en el círculo vicioso descrito anteriormente. Puede que el que escribe esto sea bastante torpe como estratega y su astucia como líder táctico se haya visto mermada a causa de la edad, pero tampoco tiene porque implementarse un nivel de dificultad excesivo. Un título tiene que promoverse para jugadores con cualquier grado de habilidad, y, quizás progresivamente, ir complicando la trama.

El nivel inicial que UFO exige es ligeramente superior a lo que el usuario  novato puede dar, y más de uno se rendirá ante lo obvio que resulta el ser incapaz de acabar las misiones sin una cantidad importante de bajas entre nuestros subordinados. El momento en el que más se nota la inexperiencia es en el uso de armas de fuego, donde ya no se trata de nuestra falta de pericia como comandantes y el culpable es más bien la falta de puntería de los soldados nuevos.

Los alienígenas no nos sacarán mucha ventaja en este aspecto, aunque en ocasiones puede ser preocupante como ráfagas y ráfagas de nuestro escuadrón no impactan en ningún objetivo a nuestro alcance. Si conseguimos superar la tensión de las primeras misiones, nos veremos recompensados con más nervios, pero esta vez en las misiones posteriores.

Remake o no del juego original, UFO: Extraterrials retiene la esencia del mismo. Añade mejoras gráficas, pero no solamente no incluye nuevas ventajas en el aspecto jugable, si no que limita algunas de las ya existentes. Si eres un fanático de la saga, no podrás permitirte no jugar, pero si simplemente eres un aficionado a la misma, sigue habiendo mejores opciones y mucho más completas. Mientras tanto, seguiremos aguardando ese título que haga resurgir toda la calidad del original, y esta vez definitivamente. Sólo resta pedir, que la espera sea corta.

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