Gaming Club
Regístrate
españaESPAÑAméxicoMÉXICOusaUSA
Rising Storm

Rising Storm

  • PlataformaPC8.6
  • GéneroAcción
  • DesarrolladorTripwire Interactive
  • Lanzamiento30/05/2013
  • TextoEspañol
  • VocesInglés

Rising Storm

Tripwire Interactive nos propone alejarnos de las frías calles de Stalingrado para pasar un agradable verano en las bonitas playas del pacifico sur. Agradable si te gusta pasearte con el diablo por el infierno que supuso los combates por un puñado de arena entre las fuerzas norteamericanas y el imperio japonés.

Actualizado a

Cuesta imaginar cuando alguien observa una foto de una isla idílica en el pacifico sur, con esas aguas cristalinas y el viento meciendo las palmeras sobre una  suave arena blanca, que hubo un tiempo que esos mismos lugares estaban más cerca del infierno de lo que miles de jóvenes desearían haber estado. Okinawa, Guadalcanal, Iwo Jima, no son capítulos de la infravalorada serie de la HBO “The Pacific” (cierto que salía perdiendo comparada a Hermanos de Sangre, pero aún así es de altísima calidad), si no que son islas donde se libraron algunas de las batallas más encarnizadas de la segunda guerra mundial. Un pequeño dato: en una isla de 13km cuadrados llamada Peleliu, se libró una batalla donde perdieron la vida más de 20.000 soldados, o en una isla un poco más grande que Ibiza, Okinawa, se estima que perdieron la vida cerca de 200.000 soldados y más de 100.000 civiles. Cuesta imaginar cuando paseamos por las alegres calles de la tropical isla japonesa en Yakuza 3 lo que debió ser un autentico infierno en la tierra. Jamás podremos alcanzar a entender lo que sufrieron los protagonistas.

Rising Storm busca acercarnos a la contienda desde la seguridad de nuestras casas. Compartir unos momentos de agonía dejando que la adrenalina fluya sin complejos por nuestro cuerpo mientras agazapados, observamos como el compañero a nuestro lado acaba de caer de un balazo en el pecho entre gritos y sollozos, y los soldados enemigos corren camuflados entre la espesura de la jungla dispuestos a rodearnos. Rising Storm es implacable, y es una de las mejores experiencias multijugador que hay ahí fuera sin duda alguna; la mejor en cuanto al escenario de la segunda guerra mundial, pero, y hay un pero, se echa muchísimo de menos una campaña para un jugador, o cooperativa, pero algo que añada emotividad a una contienda ya de por sí extremadamente realista.

Ampliar


Eso hubiera sido la guinda, porque Rising Storm sí consigue hacernos olvidar que hay un mundo ahí fuera que no está en guerra, pero que acertado hubiera sido explicar las vivencias de un soldado durante la campaña en el pacifico. Somos conscientes de que esa nunca ha sido la idea de Tripwire, ni con este ni con los excelentes Red Orchestra, en especial el Heroes of Stalingrad, pero teníamos que decirlo aunque probablemente sea simple añoranza de buenos shooters basados en la segunda guerra mundial, como los Call of Duty antes de iniciar su giro por los caminos que todos conocemos. El hueco sigue ahí, a la espera que baje la sobredosis de títulos de la segunda guerra que hubo unos años atrás. El éxito de juegos como Red Orchestra 2, tanto en critica como comercial claman para que la terrible guerra que sufrió el mundo hace algo más de medio siglo, regrese más pronto que tarde a nuestras pantallas.

A pasado largo tiempo desde  que un grupo de amigos presentaran en un concurso de Nvidia un mod para el Unreal Engine Tournament 2004, basado en la segunda guerra mundial llamado Red Orchestra: Combined Arms. El resultado fue inmejorable, ganando el primer puesto lo que significó el tener acceso a licencias de Unreal Engine 3.0 poniendo así la primera piedra de lo que sería Tripwire Interactive. No fue un camino fácil hasta que en 2011 sacaron un caballo ganador con Red Orchestra 2: Heroes of Stalingrad. Era una vuelta de tuerca a los multijugador bélicos que habíamos conocido, donde una bala te tumba sin miramientos y el realismo sale por todos sus poros. Lo cierto es que había demanda para un título de estas características, algo más accesible y directo que Arma, pero con un nivel de exigencia similar.

Ampliar



Dos años después en Tripwire han decidido sacar una expansión independiente centrada en la lucha en el pacifico. Igualmente al adquirir Rising Storm nos viene incluido el Heroes of Stalingrad, pero si decidimos instalar el Rising Storm únicamente, no hay problema; los dos se nos va a treinta y pico gigas. Rising Storm nos llevará a través de varios escenarios de las batallas más importantes que tuvieron lugar en ese apartado rincón del globo. Tenemos Peleliu, Guadalcanal, Saipan, el rio Hanto entre otras, diseñadas especialmente siguiendo el contexto histórico de aquel entonces. Peleliu, por ejemplo es una árida isla con apenas un aeropuerto que atacar o defender, todo ello bajo un sol de justicia. O por el contrario, luchar en la oscura noche de la jungla, sólo rota por la escasa luz rojiza de algunas bengalas.

Es la mezcla, de tensión y ambientación lo que hacen de la formula de Tripwire una formula de éxito, pero hay algo que sobre sale por encima de lo demás, y es el realismo. Pese a que incluye una modalidad de juego llamada “acción” hecha principalmente para atraer a los jugadores de otros juegos menos exigentes, donde somos más resistentes a las balas enemigas y podemos recuperarnos con rapidez. El problema es que si no venimos del Red Orchestra 2 con un buen nivel, deberemos jugar a esta modalidad hasta alcanzar el nivel 13 para poder jugar al modo realista, que sin ninguna duda, es el alma de esta serie y reparte miedo, frustración y disfrute por igual. En modo realista olvidaos de seguir corriendo si os alcanza una bala, o de recargas de armas en cero coma segundos. Sabréis lo que es tener que recargar vuestro fusil durante cinco segundos mientras las balas silban a vuestro alrededor.

Ampliar



Asimetría
Está palabra que está tan de moda en nuestro panorama político actual tiene una relevancia extrema en Rising Storm. Como asimetría entendemos que una de las facciones, en este caso el bando norteamericano dispone de un poder de fuego bastamente superior al japonés. Eso fue cierto en la vida real y los diseñadores han querido  ser fieles a la historia, el problema que se planteaban era como conseguir que esta asimetría no resultase frustrante para quien escogiera el bando nipón, ya que sus armas no aguantan la comparación en calidad y cadencia de fuego a las americanas. Así pues, la opción escogida fue que como soldados veteranos que eran (recordemos que cuando los americanos entraron en guerra en el pacifico, el soldado japonés llevaba ya unos cuantos años luchando en China, Filipinas y buena parte del sudeste asiático) tuvieran ciertas ventajas casi de carácter psicológico.

En medio de la batalla, cuando un compañero cae a nuestro lado, o estamos recibiendo fuego de artillería, podemos quedar totalmente inutilizados por el  pánico, en esos casos el bando japonés es mucho más resistente a perder el control. Además incluye el famoso grito de guerra “Banzai” (que traducido literalmente significa diez mil años, pero si tuviéramos que amoldarlo a occidente, se podría traducir como  larga vida al emperador) que consigue disminuir la moral y dificulta el combate en las filas aliadas. El caso es que se han recreado a la perfección más de una veintena de armas que tuvieron protagonismo en la contienda. Se han incluido algunas especiales, como ese lanzallamas utilizado por los aliados para sacar al enemigo de trincheras y búnkeres. Es un juego, pero resulta inquietante cuando un compañero tuyo fríe un bunker repleto de enemigos que chillan como corderos en el matadero. Esta asimetría es sin duda el cambio más relevante respecto a Red Orchestra 2.

Ampliar


Las armas están recreadas hasta la extenuación. Hemos destacado con anterioridad la fiel recreación de la recarga, y de su respuesta, así como una balística sofisticada que te hace pensar más de un segundo (que suele ser fatal) a donde apuntar cuando tienes un objetivo lejano. El detalle es tal que hasta las metralletas de pie calientan el tambor de la munición, hasta el punto que empieza a salir humo de él, y si no vas con cuidado puede incendiarse como en la realidad.En esa asimetría de las armas japonesas sólo destacar una que hizo estragos en las filas norteamericanas, el mortero de rodilla. Ha sido una agradable sorpresa el ver durante una de nuestras batallas como un compañero japonés, utilizaba este mortero personal, que fue ingeniado en un principio como método para tirar las granadas a una distancia superior a la que una persona era capaz. También podremos plantar granadas como trampas para reforzar las defensas japonesas, algo muy común con lo que tuvieron que lidiar los aliados.

Las clases están bien definidas y muestra la tensión que se vivía en las batallas cuando tomas conciencia de lo que puedes hacer tu con tu arma y el poder del enemigo.  Los rifles parapetados, los francotiradores en la lejanía tratando de abrir camino de la infantería; una metralleta en un bunker puede acabar con una compañía entera a menos que se use la estrategia para acabar con ella. Si os gusta eso de ir a lo loco a entrando con una metralleta en un edificio mientras correteas por la habitación cambiando la munición en menos de un segundo Rising Storm no es vuestro juego. Lo más normal es que una bala te haya dejado la mitad de tus pulmones colgando de la pared al poner un pie en un lugar que previamente no has examinado con detenimiento.

Ampliar


Rising Storm permite batallas de hasta 64 jugadores con unos mapas de un tamaño parecido al usado en Red Orchestra, o sea grandes pero muy bien equilibrados. Desde nuestro punto de vista gráficamente esta un poco por debajo de Heroes of Stalingrad. Quizás sea por el propio entorno, que en la ciudad rusa era mucho más detallada al moverse uno por las calles nevadas y las fabricas semiderruidas; aquí suelen ser o espacios muy abiertos y áridos como Pelelui o Iwo jJima, o densa jungla. En cualquier caso no se aprecia una mejoría notable en gráficos dos años después de que saliera el RO2. Pero los gritos, las explosiones, los compañeros cayendo a tu alrededor, el sonido de las balas y esa tensión por saber si tu próximo paso será el último hacen de la experiencia una de las mejores en cuanto a multijugador se refiere. Y eso duele porque a estas alturas gráficamente deberíamos ofrecer algo más pese a conseguir una altísima tasa de frames.

Ampliar

Uno de los grandes problemas que tuvo Red Orchestra 2 en su lanzamiento fue la cantidad de bugs que aparecieron. Se fueron solucionando y pese a que nosotros no encontramos ninguno de importante en nuestro análisis, la gente en general mostró su descontento con la situación. El caso es que esta vez durante nuestro análisis si que el juego se nos congelaba aleatoriamente y con cierta regularidad, hasta el extremo que debíamos reiniciar el ordenador. Es un bug  que no es universal, pero si está localizado y están trabajando en ello, pero no deja de ser una situación desagradable. Pero echando un vistazo por los foros oficiales uno puede llegar a la conclusión de que aún hay demasiados bugs para lo que es un lanzamiento normal.

A parte de estos estilos de juego como “acción”, mucho más cercano al multijugador de COD o de Battlefield y el “realista” tenemos los modos que triunfaron en RO2 como “Territorio” probablemente el más interesante, donde tendremos que conquistar o defender territorios asignados  o el clásico modo de Deathmatch.  Era difícil competir con la excelente banda sonora que creó Sam Hulick para Red orchestra 2 y aquí nos encontramos con una música más cerca de la épica de películas de acción que algo más realista como lo que busca Rising Storm, pero tiene un nivel excelente. Igualmente el sabor oriental, las flautas, y tambores hacen del trabajo de Chris Rickwood y Lennie Moore una muy banda sonora que invita a escucharse incluso fuera del juego. Aunque sinceramente sabemos lo que suele pasar en los juegos de acción,  y la mayoría preferirá desactivarla en el fragor de la batalla. En cambio, todo los sonidos característicos de cada arma, las explosiones, y los gritos, están al servicio de la atmosfera consiguiendo un resultado espectacular.

8.6

Muy Bueno

Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.