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Protectores de pantalla para Switch: Tipos y recomendaciones

¿Pongo o no pongo? 10 cosas sobre Switch El unboxing de Nintendo Switch

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Cristal templado, gel, resina, plástico…

Llega el dilema. Se acerca el lanzamiento de Nintendo Switch y las cuentas no nos salen: consola, juego, funda, tarjeta de memoria, Pro Controller… Está claro que vamos a tener que estar unos cuantos meses gastando poco, pero también está claro que tenemos que cuidar nuestra Switch al ser una consola medianamente portátil por dos grandes motivos. Por un lado, no tiene bisagras, lo cual pone más en riesgo que nunca su pantalla; y, en segundo lugar, la propia pantalla: un panel IPS de 6.2 pulgadas.

Cuando tengáis vuestra Switch entre manos os daréis cuenta que se trata de un panel considerablemente grande (exactamente igual que el de una Wii U), más que el de un Smartphone estándar –la tendencia del mercado actual dicta entre 5.2 y 5.5 pulgadas-, por lo que protegerlo se antoja recomendable, casi necesario: una inversión de garantías.

Un protector de pantalla no solo sirve para evitar ralladuras, también librarnos de un buen disgusto ante impactos que puedan desquebrajar el cristal interno en posibles caídas o golpes. Y llega entonces el momento de plantear la compra: ¿cuál pongo? ¿Cristal templado? ¿Gel tradicional? ¿resina? ¿plástico? ¿qué pasa con las burbujas?

Actualmente, los terminales portátiles de gamas altas cuentas con tecnología de protección como Gorilla Glass o Dragontrail, pero Nintendo Switch no cuesta 600 euros como para contar con esos lujos, así que hoy os traemos una pequeña guía de recomendación para cuidar vuestra Nintendo Switch.

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Plástico, el cada vez menos utilizado

El plástico tradicional nos ha acompañado durante años. Es el enemigo número uno de mucha gente por la facilidad que tiene para atraer polvo, o sensible que es ante arañazos o la poca durabilidad que nos ofrece; todo ello por no hablar de los reflejos que provoca ante luz solar. Vamos, una compra no demasiado recomendable a día de hoy viendo el precio de otros materiales. No obstante, marcas como HORI ofrecen protectores de plástico fáciles de poner (con ayudas) y de gran durabilidad. En general, el plástico es la opción más barata, pero también la menos recomendable en 2017. Y sí, es un mar de burbujas si no somos habilidosos.

Resumen: Barato. Buena solución contra arañazos, mala contra golpes. 

Gel

Probablemente muchos de vosotros nunca haya tenido un protector de gel en un Smartphone o consola, pues no son fáciles de encontrar en el mercado actual. Al contrario que el plástico tradicional, este tipo de material es bueno contra golpes, así como arañazos. Su tacto es más gomoso; son ligeramente más fáciles de poner y cuentan con más facilidad para eliminar las burbujas de aire resultantes ante el estampado sobre la pantalla. Su precio es ligeramente más caro que el plástico, pero se han posicionado fallidamente en el mercado en un intento por sustituir al plástico tradicional.

Resumen: Más caro que el plástico. Bien ante arañazos y bien ante golpes, pero su relación calidad precio palidece frente al cristal templado.

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Cristal templado

La moda, la tendencia. Uno de los grandes negocios en la actualidad. Pantallas tan grandes necesitan protección en smartphones, tablets, smartwatches y, por supuesto, consolas portátiles. En estos momentos son los más fáciles de encontrar en tiendas y su precio es cada vez menor. Se trata de una solución resistente, tremendamente resistente, que protege frente a arañazos, golpes y posibles roturas. A pesar de ser la opción más cara, es también la más duradera. Ahora bien, no todo es perfecto con este tipo de protección. ¿Cuáles son sus desventajas? Principalmente el precio y el grosor (entre 0,3mm y 0,5mm), lo cual puede dar la sensación de estar viendo una superficie transparente o que en sus marcos se evidencien excesivamente, pero también es cierto que no dejan prácticamente rastro de huellas dactilares o polvo. Si se rompen por alguna de las esquinas, esos resquicios son muy evidentes, y posiblemente a partir de ahí empiecen a agrietarse poco a poco. En Nintendo Switch rondan entre los 8 y los 16 euros.

Resumen: Los más caros, pero también los más resistentes ante arañazos y golpes. Son oleofóbicos por lo general (antihuellas) y antirreflejos.

Resina

El competidor del cristal templado. Ahora mismo es una solución poco conocida, pues solo algunas cadenas de tiendas nacionales proporcionan este servicio, como Media Martk. Hablados de servicio porque precisan de un trabajo de manufacturación. Un técnico debe medir las dimensiones de la pantalla para crear, literalmente, el protector a medida. Su precio suele rondar los 15 euros, pero la mayoría de tiendas te ofrecen un seguro de por vida para su reparación. Al fabricarse con máquinas troqueladas, quedan perfectamente adaptados a la superficie del dispositivo, y los marcos son menos pronunciados que los de un cristal templado. Sin embargo, desde nuestro criterio no son más recomendables que estos últimos al no ser en ningún caso oleofóbicos y ser más sensibles a la luz solar.

Resumen: Solución cara, pero muy resistente y duradera. Más reflejos que el cristal templado, además de una mayor sensibilidad frente a huellas dactilares.

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En definitiva, ¿qué protector de pantalla poner? Si estáis por la labor de comprar uno, lo cual recomendamos por todo lo citado a lo largo del artículo, creemos que por una mera relación de calidad precio, la compra más sensata es el cristal templado, contando sus inconvenientes. Si teméis que no quede bien y podáis tirar el dinero a la basura en cuestión de minutos, pedid ayuda a alguien que lo instale sin dejar rastro de motas de polvo y burbujas. 6.2 pulgadas de diagonal, sumado al marco negro resultante del propio panel, nos plantea una superficie muy grande y sensible. Si no queréis pagar por un servicio anti-rotura pero sí libraros de una desgracia, mejor prevenir que curar.

Nintendo Switch llega a las tiendas el día 3 de marzo por 329 euros.

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