Gaming Club
Regístrate
españaESPAÑAméxicoMÉXICOusaUSA

[BGW] Impresiones de The Sexy Brutale

El estudio español Tequila Works y antiguos componentes de Lionhead Studios se unen para este original juego.

Actualizado a

A principios de marzo desde Microsoft nos daban la triste noticia de que cerraba Lionhead Studios, el equipo de desarrollo surgido de Bullfrog y que nos trajo una saga tan relevante para las dos generaciones de consolas anteriores como es Fable. Los rumores de que otras grandes empresas de videojuegos se querían hacer con el estudio surgieron a los pocos días, pero finalmente el estudio que se encontraba ultimando Fable Legends cerró sus puertas; en junio de este año supimos que el clima entre los trabajadores de la empresa estaba viciado, que las cosas no iban bien, que ese último proyecto que nunca vio la luz del día acabó por matar al estudio de Peter Molyneaux que mostraba signos de agotamiento desde hace tiempo y que se acentuaron desde la marcha del creativo creativo del estudio.

Probablemente debido a esto Charles Griffiths y Tom Landsdale se fueron años antes del cierre de Lionhead Studios para ponerse a trabajar, junto a Jim Griffiths, hermano del primero, en un prototipo de The Sexy Brutale, un juego inspirado por propuestas tan distintas como Zelda Majora’s Mask y Gregory Horrow Show. Un juego de ingeniosos puzles en una gran mansión en la que debemos evitar que otros personajes nos vean, donde obtenemos poderes gracias a distintas máscaras y que promete una historia dura y macabra. 

Ampliar

Un juego que llegó a manos del estudio madrileño Tequila Works hace unos dos años cuando Cavalier Game Studios (el nombre que se han dado los hermanos Griffiths y Landsdale) decidió distribuir la idea original y el diseño de niveles  entre sus conocidos de la industria. Raúl Rubio, CEO de Tequila, era uno de ellos, que tras enseñar el juego a su estudio decidieron hacerse cargo de él. Miguel Paniagua nos cuenta que el juego “era bastante feo” y precisamente ellos tenían grandes artistas (como aquellos que dieron vida al universo de Deadlight o los que están inspirándose en Sorolla para Rime), por lo que pensaron en una producción.

Pero “el prototipo era un juego ya acabado, podías jugarlo de principio a fin”, nos cuenta José Herráez, PR y Product Manager de Tequila Works. “Lo único que el personaje estaba muy mal definido, todo eran cajas grises [...]. No lo hemos tocado a nivel de mecánicas”. 

Pero, ¿de qué va esta coproducción anglo-española? Desde una perspectiva isométrica que en ciertos aspectos recuerda a La Abadía del Crimen, controlamos a Lafcadio Boone, un anciano que se encuentra en la mansión que da nombre al juego y que cuenta con varios poderes para evitar que los invitados a The Sexy Brutale mueran. El nivel que pudimos jugar en el stand de ID@Xbox - desde el estudio destacan el esfuerzo que está haciendo Microsoft para promocionar el desarrollo independiente patrio - nos ponía a los mandos de Lafcadio, que tenía que evitar que mataran a un invitado de un escopetazo en la capilla de la mansión. Para ello teníamos que ir avanzando por las distintas habitaciones mirando a través de las cerraduras de las puertas y usando su poder especial que nos permitía ver los pasos de un enmascarado que nos perseguía y nos iba bajando la barra de vida si permanecíamos en la misma habitación que él. 

Ampliar

En la primera de las ocasiones el extraño enmascarado logró su objetivo de asesinato, por lo que recurrimos a otra de nuestras habilidades: hacer retroceder el tiempo. Avanzando a poco a poco oímos que algo había caído en alguna estancia aledaña. Se trataba de una bala de fogueo, que introdujimos en la escopeta que se encontraba colgada en la pared y que más pocos minutos más tarde el enmascarado cogería para dar muerte al invitado. Justo en ese momento - desde Cavelier Game Studios veían absurdo que el jugador tuviera que esperar hasta que dieran las ocho en el reloj del juego, momento en el que el asesino cometería su crimen - se nos mostraba la misma escena que cuando fallamos por primera vez, pero esta vez con una resolución distinta, que nos permitía ponernos la máscara que el invitado dejaría en ese lugar y que nos daba nuevos poderes. 

Vayamos por partes para analizar esta escena de ocho estancias - el juego final tendrá 120 de distinta ambientación dentro de la gran mansión que tardamos algo menos de 30 minutos en completar. En primer lugar, la bala, el sonido, que es “una coreografía” dentro de un juego “encriptado”, según Paniagua; “nos permite saber qué es lo que va a pasar o qué es lo que está pasando [...]. El disparo se oye cada vez que llegan las 4 y cuarto. Lo que nos permitía era hacer una música que se va adaptando al nivel y cada vez que la música se hace más intesa es porque está a punto de ocurrir algo”. Es decir, el sonido nos irá llevando del oído a través de la historia, sabiendo qué está ocurriendo en cualquier pase de la mansión y dándonos la posibilidad de anticiparnos a los actos de esos malhechores enmascarados. 

En segundo lugar, las máscaras, que forman parte “de la identidad visual del juego” y definen a cada personaje, “su personalidad y su importancia”. SOn “algo importante como mecánica jugable” pues transmiten la maldición - esa que no nos deja interactuar con los demás obligándonos a escapar - a través de los personajes y nos dan ciertas habilidades. “A medida que va aprendiendo nuevas habilidades va pudiendo desbloquear nuevas áreas”, lo que acaba convirtiendo a este juego de puzles en uno con una progresión estilo metroidvania, explica Miguel Paniagua. 

Ampliar

Finalmente, ese reloj del juego que nos permite repetir el día una y otra vez, como si se tratara de El día de la marmota, para poder salvar a todos los invitados de The Sexy Brutale; una mansión y unos personajes a los que se ha encargado de darle vida, de pasarlos de simples bloques grises a caracteres llenos de color, Enrique Fernández y el resto de artistas de Tequila Works. 

La estética que se la ha querido dar, tanto visual como musicalmente, ha sido la de finales del siglo XIX y principios del pasado. Es algo que se ve en los muebles de la mansión, en las vestimentas de los personajes, en el humor inglés del juego, en las notas musicales y, también, en la ausencia de doblaje: “[...] es algo en que se han inspirado del cine mudo. Cómo al quitar a los personajes la capacidad de hablar y transmitir sonido todo iba unido al hilo conductor de la música, y en este juego ese es el objetivo que hemos buscado”, nos cuenta José Herráez. 

A nivel argumental poco pudimos conocer salvo la premisa inicial: unos enmascarados están eliminando al resto de invitados de la mansión y tenemos que evitarlo pero nos prometen que “es una historia muy profunda y bastante fuerte, una historia dura y emotiva” en la que cada habitación tendrá su propio pasado turbulento que iremos descubriendo mientras exploramos: cuanto más dediquemos a ello, más nos enteramos del lore de la casa, como si se tratara de un Dark Souls, cuya historia también se cuenta de este modo.

A pesar de las zancadillas que los organismos estatales ponen a la hora de desarrollar un videojuego en nuestro país, es un placer ver a un estudio de desarrollo español y a uno inglés cooperar tal y como desde Bruselas se motiva a hacer en otras artes como la cinematografía. The Sexy Brutale es un proyecto más que interesante, con personalidad y, aun sabiéndose no ser una superproducción, con toques de gran producción aquí y allá que nos hacen esperar con ganas ese “principios de 2017” al que nos emplazan para jugar la versión final en PC, Xbox One o PlayStation 4.

The Sexy Brutale

  • PS4
  • NSW
  • PC
  • XBO
  • Aventura

The Sexy Brutale, desarrollado por Tequila Works en colaboración con Cavalier Game Studios para PC, PlayStation 4Xbox One y Nintendo Switch, es una aventura de misterio en la que tomamos el rol de Lafcadio Boone, un anciano atrapado en una mansión convertida en casino en la que todos sus invitados corren el peligro de morir. Gracias a nuestros poderes deberemos solucionar un sinfín de puzles y desafíos.

Carátula de The Sexy Brutale
8